—Mamá, y entonces una abeja apareció
Y de miedo alguien gritó
"¡Mátala!", dijo
Y yo miré a la abeja
y sentí sus millones de años
y le pregunté: ¿me harás daño?
Y sentí que no
Y la dejé ir
Y lloré, mamá
Y nadie lo entendió
Pero yo sí
La Tierra sí.
[Clara B. Gómez]
Poema dedicado al Amazonas y los incendios sufridos recientemente.