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Hola a todos, amigo:
Aquí os traigo otra idea de las que llevo tiempo queriendo publicar pero que hasta ahora no he podido y llevo en lista de espera unas cuántas 🙂
Parte de las fotos están realizadas con el móvil y la calidad no es muy buena.
El collar y la pulsera se hacen igual y los pendientes son muy sencillos como váis a ver 😉
Necesitamos:
- Judías blancas grandes (3 para el collar, 2 para la pulsera y 2 para los pendientes) Hay que elegirlas que sean parejas y es normal que alunas se nos agriten o rompan al intentar pasarle el punzón 😉
- Un punzón o aguja grande de lana para poder hacerle agujeros
- Palillos de madera
- Pegamento
- Trapillo o tiras de camisetas y ropas viejas que no se deshilachen mucho y si no cordones, lazos…
- Enganches para pendientes
- Hilo y aguja
- Rotulador permanente
- Alicates pequeños para cerrar el encaganche de los pendientes
Comenzamos:
Vamos a empezar por las pulseras y el collar que se hacen igual. Primero hacemos un agujero con el punzón, allí donde va a ir el palillo que va a unir las judías, en este caso en los laterales:
Después impregnamo el la punta de un palillo (que recortamos en unos dos centímetros, aunque en la foto sale entero)
Y lo introducimos en el agujero. Es bueno que quede profundo y con pegamento fuerte, pero si se insiste mucho al interoducirlo, la legumbre se puede agrietar o abrir en dos partes.
Una vez unidas, le ponemos un cáncamo en cada lado. Yo puse este normal y corriente de ferretería porque cabía muy bien la tela del trapillo y porque quería hacerlo con materiales de casa, pero los hay de joyería muchos más finos y esta manualidad se puede adaptar 😉
Y después pintamos las dos piezas con rotulador permanente, yo elegí estos motivos abstractos, fáciles y rápidos de hacer y quedó en blanco y negro. Eso le dió un toque étnico 😉
Y ahora queda ponerle el trapillo:
Que con un nudo queda listo, pero podéis darle unas puntadas al nudo si queréis para aseguraros de que no se abra con el tiempo.
Y ya tenemos la pulsera y el collar:
Los pendientes o aretes:
Los podéis pintar al principio o la final, pero depende del rotulador que uséis. El mío era un poco débil y se desgastaba al toquetearlo, por lo que al final lo tuve que retintar de nuevo.
También le podéis dar una capa de barniz al final para preservarlos mejor, yo suelo usar el de spray incoloro 😉
Lo primero que haremos será atravesar la legumbre con un punzón:
En esta que estpu pintando, se ve perfectamente que se me abrió al pasar el punzón, por lo que tuve que repetirla, luego más tarde.
Es la única parte delicada porque se agrietan si hacemos el agujero demasiado grande:
Una vez que tenemos los agujeros hechos, cortamos también dos trozos de trapillo un poquito más largos que el tamaño de la semilla:
Y procedemos a unir las piezas con aguja e hilo:
Una vez que hemos fijado bien la legumbre a la tela, hacemos un pqueño hilvanado a la tela por la parte de arriba, para despuñes poder rizarla 😉
Tiramos del hilo y lo rizamos:
Ahora lo que nos queda es poner el enganche de los pendientes:
lo fijé por esta parte que véis, ya que estaba muy reforzada:
Y la parte abierta la cerré con la ayuda de los alicates:
Y listo!!!
Aquí estoy con ellos puestos 😉
Aquí os dejo muchas fotos con los detalles:
Espero que os haya gustado la idea para hacerla en casa y de forma improvisada 😉
Nos vemos en pinterest, facilísimo, twitter o Google Plus, ya sabéis que en facebook no publican las entradas de las personas que no nos promocionamos, así que aunque os aviso allí, no se ve el aviso tampoco y estoy optando por otras redes sociales más justas, aunque sigo respondiendo mensajes allí.
Un abrazo!
2 comments
Me parece super original yo que antes de tirar una cosa pienso en que utilizarla no pensaba que eran judias creia que era algun tipo de pasta.
Muchas gracias Isabel!! Para mi esa es la diversión y el reto 😉 Un beso!
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